Cuando todo parecía indicar que el mediocampista iba a volver al Xeneize apareció la Lepra, que le hizo un ofrecimiento superador y estaría cerca de abrocharlo como refuerzo.
La novela del verano en el fútbol argentino parece tener nombre y apellido y es el de Éver Banega, el mediocampista que parecía tener todo acordado para volver a Boca pero que finalmente recalaría en Newell’s, que en las últimas horas pisó el acelerador por él y estaría cerca de cerrarlo.
Desde la entidad rosarino, donde hizo inferiores y en el que tuvo una segunda etapa ya como profesional por seis meses durante 2014, le acercaron una propuesta superadora en lo económico a la que le había prometido el Xeneize, que según dicen desde el entorno del futbolista nunca se la enviaron por escrito. Newell’s le ofrece dos años de contrato, hasta diciembre de 2025, con chances de estirar por uno más, lo que seduce al jugador.
A fines del año pasado, desde el Xeneize auguraban que Banega volvería al club que lo vio nacer deportivamente. La sensación era que rescindiría su contrato en Arabia Saudita y regresaría a la Argentina para vestir la camiseta del conjunto de Diego Martínez. En el club, incluso, aseguraban que el futbolista había dado su palabra y que lo económico ya estaba acordado entre las partes. Así, todo indicaba que Boca sumaría a Banega como refuerzo en los primeros días de 2024, algo que todavía no sucedió.